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Hoy vengo a hablaros de cómo podemos mejorar muchos síntomas trabajando la cabeza y la mandíbula.

El tratamiento maxilofacial es una rama especializada que se centra en el manejo de afecciones que afectan la cara, mandíbula, cabeza y cuello. Este ámbito es particularmente relevante para aquellos que sufren de dolores de cabeza, mareos, problemas orofaciales, así como para aquellos con bruxismo – una condición que provoca el rechinar o apretar involuntariamente los dientes.

La articulación temporomandibular (ATM), o articulación de la mandíbula, es una de las más complejas del cuerpo humano. No sólo permite abrir y cerrar la boca, sino también proyectar y retraer la mandíbula, y realizar movimientos laterales. Además, está estrechamente vinculada a la postura corporal y la columna cervical. De hecho, cualquier alteración en la postura puede afectar a la ATM y viceversa.

El tratamiento maxilofacial se encarga de aliviar tensiones y disfunciones en esta zona a través de diversas técnicas. Pero, ¿cómo se conecta esto con los dolores de cabeza y la postura?

Es crucial entender que el cuerpo humano funciona como un todo integrado. Esto significa que un problema en una parte del cuerpo puede afectar a otras. En el caso de la ATM, si hay alguna disfunción o tensión en esta articulación, puede afectar a la musculatura y la postura cervical, lo cual puede causar dolores de cabeza.

Además, las tensiones en los músculos de la cara pueden ser la causa de los dolores de cabeza, especialmente de las cefaleas tensionales y dolor en las sienes. Estas tensiones pueden ser el resultado de hábitos parafuncionales, como el bruxismo, posturas mantenidas (jornada laboral en ordenadores) y también pueden estar relacionadas con el estrés y la ansiedad.

Las técnicas utilizadas en el tratamiento maxilofacial evalúan y tratan estas disfunciones y tensiones. El proceso puede incluir terapia manual, como masajes y movilizaciones, así como ejercicios específicos para mejorar la función de la ATM y los músculos relacionados. También se pueden proporcionar consejos y educación para mejorar los hábitos posturales y reducir el estrés.

En este sentido, este enfoque puede ser una parte esencial para el manejo de los dolores de cabeza, especialmente para aquellos que no han encontrado alivio con tratamientos más convencionales. A través de una evaluación detallada y un tratamiento personalizado, puede aliviar la tensión y mejorar la función, lo que a su vez puede disminuir la frecuencia e intensidad de los dolores de cabeza.

Además de tratar los síntomas, este enfoque se centra en abordar la causa subyacente del problema. Esto significa que, además de proporcionar alivio a corto plazo, también puede ayudar a prevenir la reaparición de los dolores de cabeza en el futuro.

Con cariño, Saioa